El aula como un
espacio de acontecimientos dialógicos y de convivencia
Introducción
Es
necesario recordar, que el presente proyecto de resignificación se fundamenta
en dos ejes fundamentales, el primero tiene que ver con la praxis pedagógica,
al proponer estrategias de participación de los estudiantes del grupo 7-4 de la
I.E Cárdenas Centro de la ciudad de Palmira, en acuerdo con sus características
sociales, económicas y culturales, y al tener en cuenta la exploración de los
significados que se tienen del espacio escolar, es decir que se entiende que la
escuela posee una cultura y dinámica propia como producto de la interacción de
la comunidad educativa. El segundo eje que se presenta en este informe, se
relaciona con la convivencia y el dialogo en el escenario educativo a través de
la actividad “Reflexión acerca del
aula como un espacio de acontecimientos dialógicos y de convivencia”, la cual
concierne con el objetivo específico: Promover una actitud reflexiva en torno a
la convivencia en el aula de clase en los estudiantes del
grupo 7-4.
De acuerdo con lo anterior, se pretende
desarrollar el sentido de pertenencia en los estudiantes a
partir del reconocimiento de los significados del espacio escolar a través del
taller reflexivo: “Reflexión
acerca del aula como un espacio de acontecimientos dialógicos y de convivencia”,
para establecer una relaciones más cordiales y éticas en el grupo 7-4 en tanto
que, se reconoce al otro como parte esencial del paisaje, y por consiguiente
generar configuraciones más adecuadas de la clase a través de diversas formas
de organización y el mejoramiento de la convivencia.
Descripción de actividades e
interpretación
Experiencia
de Significado 4: Reflexión
acerca del aula como un espacio de acontecimientos dialógicos y de convivencia
La actividad se realiza a nivel transversal con
el área de Ética y Valores, y consiste en la realización de una actividad
denominada “Reflexión acerca del aula como un espacio de acontecimientos
dialógicos y de convivencia”, la cual plantea dar otra mirada al concepto de
respeto. Teniendo en cuenta su etimología a partir del Diccionario Manual
Latino-Español (Blánquez, 1956), en el cual se afirma que este concepto proviene
del latín respectus, que hace
referencia a “consideración, respeto, atención” (p. 435). Es decir que, el
respeto es una acción en la cual un sujeto primero reconoce a otro como tal y a
partir de esto, se genera una relación social mediada por el dialogo y el
establecimiento de límites entre estos.
Por otra parte, en la modernidad con el
surgimiento del liberalismo y toda su propuesta acerca de los derechos y
libertades del sujeto, se entiende el respeto “como lo opuesto a la
humillación” (Escámez, 2008, p. 230), debido a que el no tener en cuenta al
otro, significa su exclusión con respecto a un determinado grupo o comunidad;
en consecuencia, lo que se plantea de fondo es una relación teórico-práctica
del respeto, porque al ser esta visión configurada desde el racionalismo
moderno se convierte en un paradigma explicativo de la dinámica social y en
razón de esto, el deber ser de las relaciones entre los ciudadanos.
Por lo tanto, al hacer un análisis a través de los
diversos acontecimientos que se presentan en el aula relacionados con el tema
del respeto y la convivencia, se pretende promover una actitud reflexiva en
torno a la convivencia en el aula de clase en los estudiantes
del grupo 7-4, a través de un
taller reflexivo por medio del cual se pondrán en escena diferentes situaciones
que se han afectado la convivencia en el aula.
Esta actividad se planea con una semana de
anticipación, porque se escogió un grupo de tres estudiantes que se
caracterizan por sus constantes faltas al manual de convivencia, además de las
difíciles relaciones interpersonales que manejan entre estos y sus compañeros,
además con algunos docentes. En consecuencia, se les da por parte del docente
la responsabilidad de la dirección y organización de la actividad asignándoles
tareas puntuales, como la organización de los grupos de trabajo, el diseño de
las letras que se van a utilizar en el ejercicio, la explicación de la
metodología al grupo y el orden en el desarrollo de la propuesta.
La semana siguiente, el día 27 de abril los
estudiantes en clase explican la actividad a nivel metodológico, la cual consiste
básicamente en la división de los jóvenes en siete grupos asignándoles a cada
uno una letra, a partir de la cual van a narrar y graficar en un pliego de
cartulina, un acontecimiento que haya afectado la convivencia en el aula.
Posteriormente, se pegan los trabajos en el salón para que cada grupo exponga
su resultado en el orden que fueron asignadas las letras; pero lo que los
estudiantes encargados no informan a sus compañeros es que al final, estos
trabajos formaran la palabra respeto con el fin de mostrar en las prácticas de
los estudiantes los significados acerca de este en el aula.
A nivel de la observación, tal vez lo más
importante fue el desempeño de los tres estudiantes escogidos para la dirección
y organización de la actividad, porque durante todo el proceso demostraron su
capacidad de liderazgo al asumir su rol con seriedad y orden. Por consiguiente,
en ningún momento dieron muestra de lo que cotidianamente hacen en clase, es
decir asumir liderazgo negativo, de lo contrario, al final del ejercicio
organizaron por grupos las carteleras y entregaron respetuosamente a un
representante el trabajo en buen estado.
A nivel grupal, se evidencia interés en la
actividad porque tiene que ver directamente con la cotidianidad en el aula y
los recuerdos que este espacio les trae al trabajar este tipo de temáticas,
además que la interacción entre ellos es más agradable al recrear situaciones
que llegan a ser jocosas para ellos, debido a que sus ocurrencias y actos de indisciplina
emergen a través del recuerdo, logrando hacer una reconstrucción de los hechos
desde su contexto. Como por ejemplo tenemos a continuación el caso de “Gómez y
la Ega”, en la cual se narra una situación que al parecer causo mucha gracia en
el grupo a pesar de que representa una situación de irrespeto, pero finalmente
el joven que causo la situación le pide perdón al compañero y la situación se
resuelve y no se vuelve a repetir.
En la exposición y reflexión de la actividad por
parte de los estudiantes, un representante o el grupo narran la situación
especificando sus motivos, desarrollo y la manera como se resolvió la
situación, lo que causo gracia entre sus compañeros al recordar las
situaciones. Por consiguiente, se configuran finalmente dos características de
los problemas de convivencia en el aula: primero, los que tienen que ver con agresión
física entre los estudiantes; y segundo, los relacionados con el cuidado del
ambiente. Vale la pena anotar que, con relación a la forma como terminaron
estos inconvenientes, los estudiantes coinciden en que todos se han resuelto por
la vía del dialogo, como podemos observar en los siguientes casos:
Los estudiantes a través de esta actividad
logran mostrar cual es el estado o la situación del respeto en el aula de
clase, por lo tanto un concepto que es aceptado a nivel global al ingresar en
el espacio escolar, es transformado a través de un proceso de apropiación,
entendido este como lo que se
Recorta,
selecciona, adecua, excluye y hace efectivos los saberes. Antes de que los
sujetos, que representan un saber en una sociedad, lo apliquen, lo piensen y lo
hablen, la institución ha delimitado el espacio del saber y las prácticas que
tales sujetos pueden y deben efectuar mediante este saber (Zuluaga, 1999. pp.
44-45).
Es decir que, a partir de la reflexión efectuada
por los estudiantes a través de sus diversas actividades y la dinámica al
interior de este espacio, los conceptos van tomando unas características
particulares. Por lo tanto, se muestra a través de sus trabajos la ruptura de
la relación teórico-práctica planteada a partir de la modernidad, debido a que
la escuela es un lugar autónomo de producción de una cultura particular,
teniendo en cuenta que en este caso, para los estudiantes de este curso el
respeto se aleja de los postulados teóricos tradicionales, al evidenciar que
para ellos son reglas, ambiente, disculpas, perdón, acuerdos, convivencia,
trabajo en equipo.
En consecuencia, la cotidianidad y las
particularidades de los estudiantes son aspectos claves para poder acercarse a
las diversas formas que toman al interior de la escuela aspectos que tiene que
ver con la formalidad científica; como por ejemplo, en la anterior imagen el
respeto es relacionado primero con las relaciones interpersonales las cuales
están en un contexto especifico que es el aula, pero en segundo lugar este no
es suficiente cuando en este espacio no hay las condiciones dignas como las
ambientales para que se produzca una sana convivencia.
Por lo tanto, al demostrar a través del caso
anterior que la escuela es un lugar de producción de cultura y saber
particular, es importante aclarar que este:
No es un simple espacio de reproducción de la
vida social o de las relaciones sociales de producción (…). Tampoco es el lugar
de instrumentalizado que pretende la política educativa, tal como lo han
formulado los funcionalistas y tecnólogos de la educación durante muchas
décadas (Álvarez, 2015, p. 25).
Es decir que a través de este ejercicio, se abre
la posibilidad de llegar a la interioridad de la escuela por medio del análisis
de las practicas estudiantiles, las cuales no se limitan a lo que ellos hacen,
sino que también a lo que piensan, les gusta o no, su formas de relación, vestimenta,
rendimiento académico; es decir, todo aquello que envuelve su cultura en la
escuela, puesto que todos estos aspectos forman un texto el cual al
desestructurarlo permite analizar y observar su funcionamiento, su contexto,
sus lógicas, para tener un campo complejo y abierto del aula como un espacio de
acontecimientos, que van desde los aspectos puramente académicos, hasta los que
tiene que ver con la convivencia y la cotidianidad. Por ejemplo, en la siguiente
imagen se puede ver que por lo regular se expresa que el respeto es fundamental
para una sana convivencia, pero los estudiantes a través de su vivencia
concluyen que lo que hay que hacer es “convivir en respeto”, porque tienen una
mirada particular acerca de lo que significa este concepto, es decir que la
relación de correspondencia desaparece entre respeto y convivencia para
convertirse en un todo.
Conclusiones
Se ha
logrado que los estudiantes reflexionen acerca de la convivencia en el aula a
través la comprensión de las diversas dinámicas que se viven al interior del
aula en torno al tema del respeto. Esta experiencia, ha mostrado las diferentes
formas que toman los conceptos, que circulan alrededor de la escuela y que
ingresan para ser apropiados. También al ser la convivencia un tema de contexto,
es necesario revisar las diversas prácticas de aula por parte de los docentes,
puesto que al querer o pretender homogenizarlas existe la posibilidad de
provocar tensiones, donde las líneas de fuerza representadas por el maestro y
el estudiante generan problemáticas que hacen más difícil y poco significativo
el proceso de aprendizaje en el aula.
Por lo tanto, Los cambios que se han venido observando a través de la implementación
del proyecto en esta segunda fase, se pueden mostrar a través de los siguientes
aspectos:
En primer lugar, en la configuración del aula: Se ha convertido en un
lugar de dialogo horizontal entre el maestro y el estudiante, donde este último
es el protagonista del proceso de aprendizaje al tener más constantemente la
palabra para expresar sus concepciones, para hacer de esta manera que su
aprendizaje sea significativo. En este sentido, hay un acercamiento entre el
maestro y el estudiante en dos vías: en primer lugar, desde el conocimiento el
cual deja de estar centrado en un sujeto, para dar paso a la construcción
colectiva del mismo; en segundo lugar, desde lo humano puesto que al
horizontalizarse las relaciones en el aula, esta se convierte en una comunidad
de sentido donde los afectos, las emociones, las visiones o puntos de vista,
son importantes en el proceso de formación de los estudiantes.
En segundo lugar, a nivel metodológico: A partir del ejercicio de
lectura de contextos, este ha permitido que los estudiantes se acerquen de una
manera diferente a las Ciencias Sociales, además que a través de la
transversalizacion con áreas como Ética y Valores, fue necesario implementar
diversas metodologías que permitan una mayor participación de los estudiantes
pero como ejercicios el taller reflexivo debido a que por medio de estos se
puede evidenciar de manera más clara los significados que tienen acerca de
algún tema.
A nivel de la convivencia en el aula: Ha sido un acierto el dar
responsabilidades y oportunidades de cambio a estudiantes que por su
comportamiento han sido estigmatizados como indisciplinados, porque en el
desarrollo de las actividades demuestran liderazgo y ganas de manifestar que
son algo más que jóvenes que constantemente están en tensión frente a la norma.
En este sentido, es un reto que me impone el contexto porque me obliga a mirar
a estos estudiantes desde un punto de vista diferente y a idear estrategias
para acercarlos más a la escuela y alejarlos de los elementos que intentar extraerlos
de la misma.
Referencias
Álvarez, A. (2015). Del saber pedagógico a los
saberes escolares. Pedagogía y saberes,
(42), 21-29.
Blánquez, A. (1956). Diccionario manual latino-español y español-latino. Barcelona,
España: Editorial Ramón Sopena S.A.
Escámez, S. (2008). Tolerancia y respeto en las
sociedades modernas. Veritas, III
(19), 229-252.
Zuluaga,
O. (1999). Pedagogía e Historia. Bogotá,
Colombia: Editorial Universidad de Antioquia/Anthropos/Siglo del Hombre
Editores.
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